Hablar de República en el Estado español es hablar de antifascismo. Es reivindicar a nuestras abuelas y abuelos que dieron su vida luchando contra el franquismo español, el fascismo italiano y el nazismo alemán. Es agradecer a las heroínas y héroes de las Brigadas Internacionales que vinieron desde todos los lugares del mundo a luchar contra ese fascismo que representaba, y representa, el odio, la opresión, la muerte y la tiranía.
Hablamos de República porque no queremos seguir manteniendo una monarquía parásita, criminal y franquista. No queremos seguir manteniendo a una familia que desde hace siglos se ha enriquecido a costa de las clases populares y que siempre se ha opuesto violentamente al progreso y a la justicia social, y que en nuestros días representa la piedra angular del Régimen del 78 y del españolismo fascista. Acabemos con la monarquía que utiliza la mayor crisis sanitaria de las últimas décadas para intentar tapar sus casos de corrupción. Expropiemos su patrimonio y pongámoslo al servicio del pueblo. Como dice el viejo lema: !los Borbones a los tiburones!
Hablar de República, o, mejor dicho, de Repúblicas es reivindicar el legítimo Derecho de Autodeterminación de todos los pueblos que vivimos bajo el yugo del Estado español. Es hablar de Procesos Constituyentes que nos permitan construir nuevas realidades desde la libertad y la democracia, y nuevas relaciones entre los pueblos de igual a igual.
Hablar de República en Castilla es hablar de República Comunera que, siguiendo el hilo morado de la historia, recupere lo mejor de nuestra memoria democrática para construir un país con justicia social, con futuro digno para la juventud trabajadora y con un proyecto para sus pueblos y medio rural, frente al abandono y la despoblación. Una República Comunera para una Castilla unida, que fue troceada intencionadamente en 5 CC.AA. durante la falsa Transición para tratar de borrar nuestra identidad como pueblo. También es hablar de República Feminista, donde las mujeres gocen de plena igualdad material y de derechos respecto a los hombres. Donde se erradiquen las violencias machistas en todas sus formas. Donde nadie tenga que sufrir opresión por su orientación sexual o su identidad de género. Y, para construir todo esto, necesitamos República Socialista: necesitamos desterrar al capitalismo de nuestra tierra, poniendo todos los medios de producción al servicio de la clase trabajadora y de esta forma avanzar hacia un modelo de justicia social, donde desaparezcan los parásitos que se enriquecen a costa de nuestro trabajo, de nuestro futuro y de nuestra salud. Donde hagamos desaparecer la opresión de clase, nacional, de género, de raza y de orientación e identidad sexual, que el propio sistema capitalista se encarga de reproducir en su propio beneficio. En definitiva, construyamos una Castilla donde nadie sea más que nadie.
Por todo esto, animamos a la juventud castellana a poner hoy su símbolo republicano en la ventana, y salir a las 21:00 a la cacerolada por una República Comunera, Feminista y Socialista.
Castilla, 14 de abril de 2020
¡O Régimen, o Repúblicas!